EL PROGRESO DE ASTURIAS.
Agosto 1957. Navia. Nuevos valores literarios del occidente astur
Por Segundo Fernández Campoamor.
Nos cabe hoy presentar un nuevo valor literario en
estas columnas de EL PROGRESO DE ASTURIAS, y al hacerlo no podemos por menos de
precisar de manera, concreta los méritos conseguidos con sus publicaciones por
el Sr. Sela, perito agrícola y
abogado, destácanse entre ellas esa historieta de amor romántico de SEARILA,
que como recalca su recopilador, es una historia de amor pleno y sublime, en
una breve vida de mujer, que se entrega al amado, que siente por ella una
ardorosa pasión, para corresponder al que el amado le profesa.
Es una historia llena de tristeza, porque la
desgracia troncha en flor, en la juventud muchos ideales, una historia que nace
feliz en una suave mañana de otoño, y deja de ser en un Noviembre plomizo.
Es un amor, que como verdadero aún perdura cuando
las almas y los cuerpos se separan, para permanecer unidos en el recuerdo de
las horas dichosas de sus amoríos.
No sabemos en este caso quién de los dos amantes
permanece más fiel, y no dudamos del amor de ella allá arriba, pero sabemos, que
se muere cuando su amado está lejos y sabemos también, que él acude presuroso
en su corcel para dar el último adiós a su amada, y cuando llega a su hogar su
esposa ya no está allí, y entonces es cuando esta historieta entra en su fase
más interesante, porque los recuerdos que avivan su pesar hacen del amado el
ser más desgraciado de la tierra, y así se lo cree él, porque en efecto aquel
que suspiraba de amor, en espera de mitigar su gran dolor, vaga por aquellos
contornos cantando en estrofas tristes el sufrimiento que tortura su alma.
Rindamos homenaje a la pareja ideal, porque ella
muere viviendo el amor y él vive muriendo de amor. He aquí precisamente el
romanticismo, que no locura.
Bastaría este trabajo para acreditar a Don Alejandro Sela como un sutil y fluido
escritor, pero como estos días ha dado a la imprenta un trabajo al que vamos a
referirnos muy seguidamente, que se intitula Hacia la ría del Eo, que son ensayos de amor y otras cosas, que son
estampas vivientes y sencillas, que llevan los subtítulos de Señores, haya paz… – Avellanas de Navelgas, Transportes de Amor,
Luarca, El Pescador de Caña, La xata pinta, Navia de gala, El carácter de sus
gentes, EI río Navia es tan así… Salutación a un fresno, Fuego a bordo, La
pintura de Álvaro Delgado, Tapia, gente buena, El jabalí que mató «El Tapón» y por último La Searila, que
hemos dejado esbozada anteriormente.
Pero nuestra pluma acaso no puede recoger
verídicamente cuanto de literario y castizo en el mismo se comenta, por lo cual
será más cómodo una entrevista con el amigo SELA, y que él mismo sea quien contestando a nuestras preguntas,
nos diga, los móviles que la han guiado a imprimir este opúsculo, que por todos
motivos juzgamos interesante, y máxime como decimos al principio merece ser
conocido en el OCCIDENTE ASTUR, porque precisamente en esta zona tienen su
desarrollo lo que manifiesta en sus capítulos.
Libros como el que estamos comentando, son
precisamente los que están haciendo falta en esta región hermosa, que
desentrañando del pasado las viejas leyendas, que de viva voz van corriendo de
generación en generación, airee en estos episodios.
Rompe el fuego Don Alejandro Sela con esta serie de publicaciones románticas, aureoladas
por el amor, y digo románticas, aun sosteniendo un criterio opuesto a su autor
y alguno de sus comentaristas, ya que hoy contrariamente a esta historia de la
Searila, acontece, que muchos sepultan en el olvido sucesos pasados y el
personaje superviviente de esta historieta, lo rememora con verdadero deleite,
hasta que un día, el menos pensado, parte hacia el más allá, para juntarse con
su amada ideal, ¡Romeo y Julieta no lo hicieron mejor!
Y preguntamos. – ¿Cómo nació la idea de hacer este
libro? – Se lo diré. Hace mucho tiempo que leí, no sé dónde, que todo hombre
que viene a este mundo debe de hacer como mínimo: Plantar un árbol, Tener un hijo y Escribir un libro. Pues bien, a
través de mi vida planté cientos de árboles, tengo tres hijos. Desde hace algún
tiempo la aparición de un libro mío se le veía venir. Era algo inevitable en la
línea de mi destino.
– Los principales temas que trata en su libro se
relacionan con el amor.
¿Por qué? Nací un 14 de Febrero, día de San
Valentín, patrono de los enamorados. Esto amigo mío obliga a mucho… y no le
digo el año de mi nacimiento porque tengo ya la edad suficiente para empezar a
ser coqueto.
– Leyendo su libro se ve claro lo que Vd. piensa
del amor. No obstante ¿quiere hablar más de esto? Con mucho gusto; el amor dice
el P. Feijoo, es el príncipe de las pasiones y sin embargo es una pasión muy
poco estudiada en cuanto a su fundamentación filosófica.- ¿por qué amamos? – No
se sabe. Tal vez por instinto, por soplo divino. En mis estudios sobre el amor
encuentro muchos problemas y muy interesantes y es especialmente grato este
estudio porque la mayoría de los poetas lo han tratado y en forma poética, nos
dijeron sus confidencias. Recuérdese a Quevedo, Herrera, Garcilaso, Campoamor,
al Viejo Pancho y tantos más. Estudiar las cuestiones de amor es vivir en
permanente emoción. Como hombre a través de mi vida ha habido sus más y sus
menos. Estudiar el amor es evocar lo mejor de nuestra vida y vivir en cierto
modo en la luna. Esto tiene particular interés, ya que el amor fue siempre una
amargura… pero querido amigo una amargura deliciosa…
Concretamente. ¿Qué me dice de la mujer como sujeto
del amor? La mujer debe ser siempre respetada y adorada por el hombre. Mi
consigna es este verso de Quevedo: Amo y
no espero, porque adoro amando.
Bien contestado. Se ve además a través de su Libro
que el paisaje le encanta.
Yo lo creo ¡Y tanto! Soy un enamorado de las nubes,
del mar, de los árboles, de las peñas y sus coloraciones y en fin de los
ingredientes que lo forman. En nuestra tierra hay de todo eso como para vivir
en perenne expectación…
Nos sigue manifestando que no sabe que fines persiguió
al escribir su libro, que lo hizo por amor y lo que así se hace no se puede
explicar con palabras, Cree que Dios movió su mano para escribirlo; dándole un
empujoncito como el padre a su hijito al dar los primeros pasos… con cierto
cariño.
Los proyectos para el futuro, lo de siempre;
estudiar. Quizá – dice – no sirva ya para otra cosa. Para mi Asturias y
especialmente nuestra zona es un problema planteado. Hay que hacer lo posible
por resolverlo. Unos en el aspecto social y político, los otros en lo artístico
y cada cual lo mejor que pueda.
A una última
pregunta nos responde así: Tengo especial interés en darle las gracias a Vd.
que me asoma al “PROGRESO DE ASTURIAS» de la Habana, y aprovecho la
oportunidad de saludar a los lectores, de esta revista tan amena y llena de amor
para Asturias y para España.