ECO DE LUARCA. 9-8-1964. Un cuadro de Alejandro Sela

Uncategorized

ECO DE LUARCA. 9-8-1964. Un cuadro de Alejandro Sela. Pág. 17

D. Alejandro Sela, un hombre polifacético, nos envía para este extraordinario dedicado a la Villa de Navia una fotografía que corresponde a un cuadro pintado por él, en uno de los más céntricos lugares de la villa. Entre los hermosos edificios de la Carretera General, queda este rincón donde las viejas casas se asoman al tráfico de la carretera. El carro de la panadería y el antiguo farol, son como dos recuerdos del pasado que permanecen aún en este instante en que la vida ha evolucionado de tal forma que, lo que hace cincuenta años era el último grito, hoy es arcaico y extemporáneo.

Gustosos reproducimos esta pintura del Sr. Sela, que si antes colaboró con nosotros enviándonos interesantes artículos y reportajes, lo hace ahora, en que su salud le impide concentrarse para escribir, con esta hermosa pintura que dedicamos a todos los amantes de la Vieja Navia, que se asoma, acaso por poco tiempo, a la carretera general.

REGIÓN. 22-8-1963. Alejandro Sela expone sus cuadros en Vegadeo

Uncategorized

REGIÓN. 22-8-1963. Alejandro Sela

Sela, esta especie de Leonardo del Eo, perito agrícola, abogado, juez, poeta, ensayista, literato, polemista y extravagante viajero, se nos sale ahora por la pintura”, escribe Álvaro Delgado. Todo lo que dice el pintor madrileño, acerca de Alejandro Sela, responde a una realidad. El perito agrícola, abogado, juez, ensayista, literato, polemista, y extravagante viajero en, Navia, sobre la dulce orilla, que don Ramón de Campoamor cantara. De Alejandro Sela pueden esperarse, en el teatro intelectual las más sorprendentes e interesantes aventuras. Cuando se cansa de dictar sentencias o aconsejar sobre cultivos, toma la pluma y escribe, a lo mejor un ensayo sobre los paisajes de la villa de Navia o un libro de versos sobre las riberas del Eo, que él ama de manera harto singular. Otras veces, con objeto de desintoxicarse del ambiente habitual, salta encima de la moto de un amigo y corre, sin preocuparse de la lluvia ni del viento, por aquellos caminos donde cabe encontrar tipos humanos dignos de tal nombre. Ahora, así por las buenas, ha inaugurado una exposición de pintura en la Casa de Cultura de Vegadeo. Y la gente, que sabe lo que vale Alejandro Sela, acude a ella desde todas las villas del Occidente.

El perito, abogado, juez, poeta y pintor, posee una categoría humana de primera calidad. Como todos los hombres que llevan mucho dentro, Alejandro Sela es una criatura sensible, abierta al diálogo, enternecida, capaz de comprender más allá de lo que, normalmente, comprenden la mayoría de las, personas.

Sela ha pintado, para la exposición de Vegadeo, paisajes del occidente asturiano: Tineo y Luarca, Navia y Castropol, Arbón y Figueras… Y alguno de Toledo y Colmenar de Oreja. Todos tienen, de forma sobresaliente, la huella de la acusada personalidad de este Alejandro Sela polifacético y amigo de cualquier clase de criaturas.

REGIÓN. 18-8-1963. Alejandro Sela expone sus pinturas en Vegadeo

Uncategorized

REGIÓN. 18-8-1963. Alejandro Sela visto por Álvaro Delgado. (Texto incluido en el Catálogo de la Exposición de pintura, celebrada en la Casa de Cultura de Vegadeo).

Por Álvaro Delgado

Sela, esta especie de Leonardo del Eo, perito agrícola, abogado, juez, poeta, ensayista, literato, arquitecto, polemista y extravagante viajero, se nos sale ahora por la pintura. Y nos muestra una serie de cuadros que francamente nos decepcionan.

Entendamos. Quien conoce a Alejandro sabe que es un gran dialéctico del amor.

Nos puso a todos en la pista de «la Searila» en un bello relato. Después contribuyó a la multiplicación de los noviazgos por toda esta zona cuando publicó aquello «De Andés bajó el amor”. Y en la terraza del Martínez, aquí en Navia, tiene cátedra abierta, viva y diaria sobre el tema.

Es lógico que sabiendo esto esperásemos que eligiese como motivo para sus pinturas lo que tanto ha cantado y tan ardorosamente defiende.

Pues no.

Sela, que es un astuto y utiliza lo sorprendente, nos ha dado lo que pudiéramos llamar los escenarios, pero nos ha escamoteado los personajes y las escenas. Y de aquí la decepción.

Y también la sorpresa.

Sabemos que estos cuadros están pintados en lugares donde se sucedieron las aventuras amorosas de Don Quijote, de Salicio y Nemoroso. De la Searila. Y… quizá, también del propio Alejandro, ya que en forma de Arte hay mucho de autobiográfico. Pero no aparecen las historias que esperábamos. Y este es el fraude.

Y es que Sela, como digo antes, es muy astuto y está muy al día y sabe que «la historia» en pintura no cuenta. Que vale más ponerle al cuadro una buena dosis de poesía. Y él la ha puesto en tal cantidad y en forma tal, que quedamos sorprendidos, encantados y olvidamos las tabarras sobre el Amor que nuestro amigo nos encaja en las terrazas de los cafés de Navia.

Y remendándole, decimos:

– ¡Ah! Esta exposición ha de verse.

Y hay que hablar de ella. Y ha de gustarles.

Y si no me enfado.

¡Palabra!

LAS RIBERAS DEL EO. 27-5-1961. Sobre el libro «De vuelta del Eo»

Uncategorized

LAS RIBERAS DEL EO. 27-5-1961. Un escritor del Eo. Alejandro Sela

Por Eustaquio Lago. Vegadeo, mayo de 1961

Entre la abundante cosecha de escritores del Eo, no es éste el menos interesante, especialmente por la amorosa y continuada labor que viene realizando en pro de las bellezas de esta encantadora comarca, que él sabe percibir admirablemente a través de sus gruesas gafas y transmitírnoslas después en sugestivas páginas.

Todos sabemos que Sela ha nacido muy próximo a esta ría, sobre una breve llanura que bordea, en suave curva, las sosegadas aguas del Eo. De este, paisaje sereno y dulce se halla impregnada su alma que aflora, generalmente, hacia una ingenua poesía. Prefiere, como Puvis de Chavannes y Corot, las plateadas brumas, los colores suaves, apagados y llenos de serena luz, en contraposición a los fuertes y brillantes. Lo dice bien claro en el pórtico de su último libro “De Vuelta del Eo”: “La ría del Eo es algo así como una mujer guapa. En las estaciones primavera y verano se la ve más solicitada”. Y Sela, como buen enamorado, siente celos y prefiere cantarla en el otoño, se le da mejor. Y más adelante: “No, por favor, no me deis mujeres en la primavera y en el verano. ¡No las aceptaría! Dádmelas, si alguien quiere hacerme el regalito, en el otoño…”

No rechazo ni apadrino su gusto, pero en este caso y ante una invitación tan sorprendente, yo – que me agrada ser generoso con los amigos – enviaría por una primaveral, las otoñales que quiera, y lo que sobre, que sobre… También se deslía en entusiasmos y elogios hacía – como él dice – la antiprimavera, en los meses de febrero y marzo, captando las bellezas de los nabos y pesegueiros en flor, precisamente en la estación en que fas un’a xistra que esmedrella y que apenas si se puede contemplar con satisfacción, la naturaleza.

A estas alturas ya comienzo a dudar de la sinceridad del escultor, que, a pesar de su fondo esencialmente poético, no deja de salpicar de humorismo sus simpáticas narraciones. Dialoga con todos los elementos y avoca, encantadoramente, paisajes, tradiciones, escenas de caza; cruzan modestos héroes de los cuatro puntos cardinales del Eo: Puga, Reviso, Meredo, Primote. Lilao, Altruán…  Todo ello recogido en dos libros de muy pocas hojas, pero de interés excepcional, sobre todo para aquellos que aman y sienten el paisaje, costumbres y tradiciones de nuestra región. Otras generaciones halladas en estas estampas, llenas de color local, gratos y amenos recuerdos, escritos a su manera; es decir, con personal estilo, en trozos muy cortitos, como pintura puntillista, o a saltitos de estornino huido.

Ilustran las páginas del libro unos dibujos que parecen feitos de morondanga, pero que tienen su encanto, del notable y laureado pintor Álvaro Delgado.

Primero fue “Hacia la ría del Eo”; hoy “De Vuelta del Eo”. Parece que “estar de vuelta” es haberlo dicho todo o casi todo, pero no lo creemos así;  aún le falta a Sela, para completar su labor, dos sonatas: Primavera y Estío.

Afirmaríamos que Sela no hace un viaje sin su carpeta y su estilográfica, que llenará de croquis y apuntes para asomar en obra hecha y terminada que ya esperamos con verdadera impaciencia.

EL PROGRESO DE ASTURIAS. Septiembre 1960. Sobre el libro «De vuelta del Eo»

Uncategorized

EL PROGRESO DE ASTURIAS. Septiembre 1960. El nuevo libro de Alejandro Sela

Don Alejandro Sela acaba de dar a la luz un librito, un nuevo libro de 90 páginas. Su título “De vuelta del Eo”, es el complemento de su primera publicación, cuando hace meses iba en dirección a dicha vía fluvial. Ahora te torna con más bríos, más garboso y alegre. No denota ningún cansancio. Trae más experiencia en su trabajo. Está lujosamente editado y lo ilustra su gran amigo Álvaro Delgado. La literatura y la pintura encuentran por esta vez una yuxtaposición inmejorable. Se identifican. Asegura el autor que son “breves ensayos de amor y otras cosas”, y así es en efecto. Hay cuentos y narraciones. Por sus páginas discurren bellas estampas del Occidente astur, primorosamente logradas. Son la realidad. Sela es un escritor realista. Poco ha de quedar que él no haya observado, para plasmarlo en sus páginas, y es que el escritor ama entrañablemente a la tierra asturiana, sus costumbres, sus amaneceres, sus hombres, sus árboles, (él plantó muchos), para expresarlo en una prosa sencilla, seca, precisa, que le dan amenidad, su principal mérito. Pudiéra… Incompleto

ECO DE LUARCA. 10-7-1960. Sobre el libro “De vuelta del Eo”

Uncategorized

ECO DE LUARCA. 10-7-1960. Otro libro de Alejandro Sela. “De vuelta del Eo”. Pag. 12

No es posible decir que nos ha sorprendido con un nuevo libro, el Sr. Sela, porque, conociendo su obra anterior, no puede haber sorpresa alguna. «Hacia, la ría del Eo», nos deleitó con la prosa fácil y ágil del autor y su riqueza descriptiva; ahora volvemos con ėl en esta continuación del último título, entre prosa poética, romanticismos despertados, y color, mucho color, de enamorado del país, enamorado de la ternura, enamorado del Amor, si bien trate de esconderlo entre chispas de fina gracia.

Alvaro Delgado, ilustró con su maestría, y editó «Imprenta Boada» de Luarca, con la pulcritud que es su norma, y la que corresponde a pluma tan bien cortada como la de Sela, tan elogiada por autoridades como Marañón, Otero Pedrayo, y otros grandes críticos.

RADIO TELEVISIÓN FRANÇAISE. 10-7-1960

Uncategorized

RADIO TELEVISIÓN FRANÇAISE. 10-7-1960

Queridos oyentes:

Hace dos años nos llevó Alejandro Sela, con «dos palabras» «Hacia la ría del Eo», para que saboreásemos las «Avellanas de Navelgas»; asistiéramos a la rifa de la «Xata Pinta», una realidad del campo; y, aislado, al borde la ría de Navia, a dos pasos de la carretera descubriéramos al «Fresno de las Aceñas»; imagen – acaso – del alma asturiana, seria y discreta, cuando remonta la cumbre de Panondres o los riscos de Covadonga (cima eterna de la historia), como al reflejarse en las aguas tersas y limpias del Navia, a las que no concede importancia el fresno, seguro de sí mismo y ajeno a toda otra vanidad…

Con dibujos de Álvaro Delgado, reemplazando las anteriores acuarelas, lenta, segura y placenteramente ha ido Alejandro Sela demostrando su habilidad de pescador, refiriendo actos, recamados de los más vivos colores, como el deportista que nos habla de los avances de la técnica en las veredas de los cauces, bajo las enramadas, donde ha encontrado su sombra y conseguido realizarlo todo, con habilidad e ingenio, es decir, a pulso. «De vuelta del Eo» es otra colección maravillosa de estampas, de reportajes certeros, a lo largo del año último recogidos en nuestras emisiones… como una evocación marinera, el amor del árbol y del monte, por las incomparables rutas de Asturias, cuando despunta el amanecer gitano o van cayendo los atardeceres domingueros, propicios a las parejas que sueñan con el hogar… El bramido del mar, descendiendo por las amplias chimeneas de campana, presta ambiente a los relatos o cuentos, desde «El Monstruo de Meiro», hasta «Josentonín» y «La Raposa y el lobo» ululando, a veces, por las quietas, silenciosas calles de la Ciudad dormida arrebatada por las ondas, hacia los lugares más apartados del globo, bajo el embrujo de las palabras, que administran, sabia y cariciosamente las mujercitas de la Radio…

LAS RIBERAS DEL EO. 9-7-1960. Sobre el libro “De vuelta del Eo”

Uncategorized

LAS RIBERAS DEL EO. 9-7-1960. “De vuelta del Eo”, nuevo libro de Alejandro Sela

Sobre la publicación de este libro dice “ABC”, en su número extraordinario del día 3 del actual: “Sela, Alejandro: ‘De vuelta del Eo’” (90 páginas.- Imprenta Boada.- Luarca)

En estos “Ensayos breves de amor y otras cosas”, como subtitula su obra el autor, hay, en primer término, una sensible, natural y cierta manera de ver e interpretar, fielmente los accidentes de su torno, de aquellos que, dentro del ámbito por el que vive o viaja el escritor, con sentido poético, prenden su pupila emocionada. Al decir que el Sr. Sela es un poeta, no cometemos ninguna hipérbole: poeta en prosa, sentimental y, en ocasiones, humorista. Un humorismo impregnado de ternura, de amor, capaz de encerrar en una metáfora, en un símil, un breve mundo de emoción y de gracia.

En realidad, “De vuelta del Eo” – que contiene unos finos dibujos ilustrativos de Álvaro Delgado – es como la segunda parte de “Hacia la ría del Eo”, la anterior obra del señor Sela, da amplio vuelo difusivo y que mereció vivos elogios de Marañón, Otero Pedrayo, Vasconcelos y otras figuras eminentes de la literatura española e hispanoamericana. La personalidad, del autor se ratifica, por sus claros valores, en la nueva teoría de estampas, luminosas y sazonadas, que integran “De vuelta del Eo”.

REGIÓN. 6-7-1960. Sobre el libro “De vuelta del Eo”

Uncategorized

REGIÓN. 6-7-1960. “De vuelta del Eo”

Alejandro Sela, el gran Alejandro de Navia, ha escrito un nuevo libro sobre sus tierras del Occidente astur. Se titula “De vuelta del Eo» y lleva dibujos nada menos que de Álvaro Delgado, ese otro fiel enamorado de los hombres, de las tierras y de las cosas de Navia, Luarca, Tapia y paisajes de parecido escudo. Alejandro Sela dice, al final de su trabajo, que éste «imprimióse en la primavera de mil novecientos sesenta, en la imprenta. Boada, de Luarca, después de un invierno lluvioso y frío, durísimo…« Alejandro, con, tal nota reafirma la primavera, reafirma su fe en el renacer espiritual de cada mañana, reafirma su bondad e inteligencia de hombre que ha preferido villa a su medida, a ciudad, e desconcierto. Sela sigue escribiendo. Esta es, a mi entender, la mejor noticia. Sigue escribiendo con esperanza.

ABC. 2-7-1960. Sobre el libro “De vuelta del Eo”

Uncategorized

ABC. 2-7-1960. Pág. 39. Libros nuevos. Sela, Alejandro. “De vuelta del Eo”. 90 pgs. Imprenta Boada. Luarca

En estos “Ensayos breves de amor y otras cosas”, como subtitula su obra el autor, hay, en primer término, una sensible, natural y cierta manera de ver e interpretar, fielmente, los accidentes de su torno, de aquellos que, dentro del ámbito por el que vive o viaja el escritor, con sentido poético, prenden su pupila emocionada. Al decir que el Sr. Sela es un poeta, no cometemos ninguna hipérbole: poeta en prosa, sentimental y, en ocasiones, humorista. Un humorismo impregnado de ternura, de amor, capaz de encerrar en una metáfora, en un símil, un breve mundo de emoción y de gracia.

En realidad, «De vuelta del Eo”- que contiene unos finos dibujos ilustrativos de Álvaro Delgado – es como la segunda parte de “Hacia la ría del Eo», la anterior obra del Sr. Sela, de amplio vuelo difusivo y que mereció vivos elogios de Marañón, Otero Pedrayo, Vasconcelos y otras figuras eminentes de la literatura española e hispanoamericana. La personalidad del autor se ratifica, por sus claros valores, en la nueva teoría de estampas, luminosas y sazonadas, que integran “De vuelta del Eo«.